Reparar un golpe en la cabeza de tu flauta travesera, ¿sí o no?

Uno de los mayores temores de un flautista es, probablemente, encontrarse un golpe en la cabeza de su flauta. Seguro que alguna vez te has visto en esa situación en la que sin querer golpeas tu instrumento, contra el atril por ejemplo, y por un momento cierras los ojos esperando que el metal no se haya abollado. ¿Qué hacer si se nota el golpe? ¿Es necesario llevarla al taller?

Éstas son algunas recomendaciones a tener en cuenta cuando te preguntas si debes reparar un golpe en la cabeza de tu flauta travesera o no.

Pequeños golpes en tu flauta travesera

La cabeza es una de las partes más delicadas de la flauta travesera. Por eso debemos tener especial cuidado con las abolladuras y golpes que se puedan producir en esta zona. Normalmente los golpes pequeños no suelen suponer un problema. Lo sabrás porque no notarás cambios en el sonido o en la forma de salir el aire. En cambio, un golpe de mayor tamaño sí podría modificar el flujo de aire. En ese caso sí tendrás que llevarla al taller.

El material de la cabeza de tu flauta también afecta

A la hora de reparar un golpe en la cabeza de la flauta, el material del que esté fabricada influirá (y mucho) en el resultado de ésta. Si la cabeza está hecha de materiales como el oro o la plata maciza, el luthier podrá trabajar mucho mejor y el resultado en la reparación será prácticamente perfecto. En cambio, las cabezas de estudio, al ser plateadas, únicamente llevan un baño de plata por encima, por lo que no quedarán tan bien como las macizas.

Localizar en qué parte está el golpe

¿Todos los golpes se pueden reparar? La respuesta a esta pregunta es, más bien, un no. Las zonas más delicadas como son el bisel o la espiga son todavía más complicadas de arreglar.

Si tu golpe se encuentra en el tubo, entonces tiene fácil solución. Limpiar, volver a darle forma y pulirlo será mucho más sencillo porque está en una zona de fácil acceso y su forma no es tan compleja.

En cambio, si el golpe está en el bisel será difícil repararlo. Esta zona en la que se apoyan los labios es de muy difícil acceso y se hace prácticamente imposible recuperar su forma inicial.

Si el golpe está en la espiga,  sea como sea el tamaño del golpe, probablemente necesites llevar tu instrumento al taller. Es una parte muy delicada porque necesita encajar a la perfección con el cuerpo del instrumento. Cualquier abolladura podría provocar pérdida de aire o, incluso, si la cabeza está muy suelta, podría caerse y provocar un golpe mayor.

En cualquier caso, si tu flauta tiene algún golpe y no estás seguro si está afectando negativamente al sonido, consulta a tu taller e infórmate de cuál es la mejor solución para arreglar tu instrumento.

Más sobre cómo cuidar tu instrumento: Cómo limpiar el bisel de tu flauta travesera